La ingeniería civil en Venezuela está experimentando una transformación gracias a la incorporación de materiales inteligentes. Estos materiales, capaces de responder a estímulos externos como temperatura o presión, mejoran la durabilidad y seguridad de las estructuras, y permiten una construcción más sostenible y eficiente. Su aplicación está cambiando el futuro de la construcción en el país.
El ingeniero Ángelo Marinilli, asesor en Ingeniería Estructural de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), ha advertido que aproximadamente el 90% de la población venezolana reside en zonas propensas a terremotos. Señaló que muchas edificaciones presentan problemas de mantenimiento y que existe una proliferación de construcciones informales, especialmente en laderas, lo que incrementa el riesgo ante eventos sísmicos. Marinilli destacó la necesidad de actualizar y aplicar las normativas de diseño antisísmico para mejorar la resiliencia estructural del país.
La Escuela de Ingeniería Civil es un factor fundamental en el desarrollo de la región, así como en el entorno Nacional e Internacional. Su personal es reconocido por su labor académica y apego a la actualización permanente como signo de excelencia. Sus egresados ocupan un lugar sobresaliente en el desarrollo del país, mostrando niveles de excelencia en las tareas que les ha correspondido realizar. Mérida, Noviembre 2012